¿Tormenta perfecta para el maíz 2024/25?
Sí y no; sí, porque los factores que están en contra son muchos y complejos. Y no, porque a pesar de todo se espera un repunte si mejoran las condiciones ya que no hay decisiones definitivas. Lo que hay es mucha incertidumbre y decisiones que se postergan y que van respondiendo a la necesidad del día a día. Mientras tanto, los barbechos se están haciendo abiertos, o sea tanto para una posible siembra de soja o de maíz. Este contexto se resume en una intención de siembra maicera 2024/25 que cae en un 30% respecto del año pasado. Es importante recordar que hace un año, el maíz era el cultivo que llevaba la bandera del progreso técnico y en el que más se invertía. Fue el cultivo que más creció en área, ya que se sembró un 30% más en la región. El cultivo tambien tuvo un rol muy importante como refugio de valor ante la incertidumbre del 2023. Incluso, ese año la precampaña maicera mostró una intensísima actividad desde su inicio. En cambio hoy, la precampaña del cereal en la región está en un letargo cuando falta muy poco para la siembra, apenas menos de un mes y medio.
Maíz 2024/25: Se señala una caída que va del 10 al 60% respecto al ciclo pasado
La actividad comercial en la región núcleo está detenida y los productores postergan decisiones. “No se están vendiendo insumos ni haciendo operaciones. Está todo detenido, sin consultas. Se prevé una baja del 50% en el área de maíz respecto al año pasado”, dicen en Carlos Pellegrini. En María Susana señalan una caída del 60% de área. Hacia el sur santafesino, en Bombal, esperan una reducción del 10 al 15%, pero allí se observa un leve movimiento en las ventas. “El productor compra lo necesario en el día a día. No estamos viendo grandes compras de pre-campaña como en otros años”, comentan desde Río Tala. Los asesores de Los Quirquinchos y Venado Tuerto coinciden en la calma comercial y estiman una caída del 50% en la intención de siembra. Sin embargo, no descartan que si las condiciones cambian, los productores tomen decisiones sobre la marcha: “Puede ser que nos llevemos una linda sorpresa”. Entonces, ¿qué es lo que tendría que cambiar? Una mejora en el precio internacional y buenas lluvias en la salida del invierno serían dos factores fundamentales.
Factores negativos: temor a que no llueva a la siembra y chicharrita
Los técnicos regionales destacan dos factores que están influyendo en la toma de decisiones entre los productores de maíz. El primero es el temor a la chicharrita, un insecto que ha generado fuertes daños y que limitará las posbilidades de hacer siembras tardías: el productor las ha descartado de plano. Recordamos que el año pasado se sembró un 35% como tardío y en el año anterior, el de la “3ra Niña”, la única forma de sembrarlo fue como tardío. El segundo factor son los precios en cosecha, los márgenes actuales de este cultivo no son alentadores.
¿Cuáles son los números actuales del maíz?
Según la última actualización (25 de julio de 2024), los márgenes netos del maíz muestran números ajustados. En campo propio, el margen es de 380 u$s/ha, mientras que en campo alquilado es de 40 u$s/ha. Estos números evidencian una caída de 77 u$s/ha en comparación con la pre-campaña del año pasado en campo propio. Esto se explica principalmente por una caída en el precio a cosecha del cereal, que pasó de 18,3 u$s/tn a 17,2 u$s/tn. En el caso de campo alquilado, hay una leve mejora pero por algo que es más malo que bueno. El incremento de 37 u$s/ha se debe principalmente a una reducción en el costo relativo de alquileren u$s/ha, ya con el mismo valor de qq/ha de soja— que se mantienen en nuestros cálculos en 18 qq/ha—hace un año, en el mercado disponible era más elevado: 35,63 u$s/tn contra hoy, 28,86 u$s/tn. Esto implicaba mayores gastos para el productor en términos de alquiler, pero también mayores ingresos por la oleaginosa.