Con un acuerdo estratégico que marca un precedente en el sector agroindustrial, Bayer y MSU Green Energy sellaron un contrato a 10 años para abastecer con energía solar a la planta María Eugenia, ubicada en Rojas, Buenos Aires, la mayor procesadora de semillas de maíz del mundo. Desde abril de este año, más del 50% del consumo energético de la planta ya se cubre con fuentes limpias.
Este hito posiciona a María Eugenia como la segunda planta de Bayer en Argentina en alcanzar esta meta, consolidando la estrategia global de la compañía orientada hacia la neutralidad climática para 2030.
“La transición hacia energías limpias no es solo una meta ambiental, es una decisión estratégica para el futuro del agro”, subrayó Juan Farinati, presidente y CEO de Bayer Cono Sur. “Este acuerdo nos permite avanzar con hechos concretos en la descarbonización de nuestras operaciones y nos acerca a nuestros compromisos globales”.
El contrato firmado se enmarca en un modelo de abastecimiento energético a gran escala, conocido como PPA (Power Purchase Agreement), y contempla la provisión anual de 10.700 MWh de energía solar. Según estimaciones de la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA), esta cifra representa una reducción de 4.755 toneladas de CO₂ al año, equivalente a las emisiones de más de 1.000 autos particulares.
Un modelo replicable para toda la agroindustria
Desde MSU Green Energy, empresa líder en el sector solar en Argentina, destacaron la sinergia entre el agro y las energías renovables. Con una capacidad instalada de 329 MW a través de cinco parques solares distribuidos en distintas regiones del país, la firma sigue expandiendo su presencia con nuevos proyectos en desarrollo.
“La transición energética es posible cuando se construyen puentes entre sectores productivos y energéticos. Este proyecto demuestra cómo el conocimiento del campo puede integrarse con soluciones renovables de escala”, señaló Manuel Santos Uribelarrea, presidente y fundador de MSU Group.
El acuerdo con Bayer refleja una apuesta por un modelo productivo competitivo y sostenible, que no solo diversifica la matriz energética nacional, sino que también eleva el estándar de eficiencia en el corazón del sistema agroindustrial.
Innovación ambiental en el corazón de la producción
La planta María Eugenia ya venía avanzando en acciones de impacto positivo en materia ambiental. Además del nuevo acuerdo solar, la instalación cuenta con paneles fotovoltaicos en sus edificios administrativos, una estación de carga para vehículos eléctricos, luminarias LED alimentadas con energía solar y un edificio certificado bajo normas LEED.
El edificio “Temporario Torre” incorpora sistemas de captación de agua de lluvia, climatización inteligente, sensores de movimiento y materiales de baja emisión. Todas estas acciones integran una estrategia de sustentabilidad que se despliega de manera transversal en las operaciones de Bayer.
“Estamos comprometidos con la transición energética. Este acuerdo representa un nuevo paso firme hacia una operación más sustentable, con impacto real en nuestra comunidad”, sostuvo Jorgelina Cárcova, líder de Producción de Semillas en la planta María Eugenia.
Hacia una agroindustria regenerativa
Tanto Bayer como MSU Green Energy coinciden en la importancia de escalar el uso de fuentes limpias dentro de la cadena de valor agrícola. El modelo aplicado en Rojas no solo busca reducir emisiones, sino también servir como referente para otras industrias y regiones del país.
El acuerdo se alinea con las metas internacionales de sostenibilidad, promueve un agro más competitivo y resiliente, y contribuye a la regeneración del ambiente productivo. En un contexto donde la presión sobre los sistemas alimentarios es cada vez mayor, decisiones como esta permiten avanzar hacia un paradigma más eficiente, innovador y responsable.












