La exportación de vinos argentinos al resto del mundo experimentó una disminución significativa, en parte debido an una de las peores cosechas de la historia. Los vinos que cruzaron las fronteras en la primera mitad del año fueron 31,7% menos que en el mismo período de 2022.
Según el Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV), Argentina exportó 96,5 millones de litros de vino en los seis primeros meses de 2023.
Se exportaron 44,8 millones de litros menos en comparación con el mismo período de 2022. De la cantidad total, 74,5 millones (77,2%) son vinos a granel (-44,5%), mientras que 22 millones (22,8%) son vinos fraccionados (-26,8%).
En el período de enero a junio, el precio promedio del vino total fue de 3,5 dólares/litro con un aumento de 15,6%, mientras que el precio fraccionado llegó a 4,23 dólares/litro.
Las exportaciones de mosto concentrado en todo el año ascienden a 15.949 toneladas, un 61,2% menos en volumen y un 50,3% menos de ingreso de divisas respecto al mismo período del año anterior.
El precio promedio del mosto concentrado en el acumulado del año llega a 1.863,6 dólares/tonelada y en junio se comercializó a un precio promedio de 1.905,5 dólares por tonelada.
Si se compara la exportación de vinos y mostos en volumen mensual junio 2023 contra junio de 2022 la caída en la exportación de vinos total fue de -42,7% (vino color: -41,3% y vino blanco: -49,7%).
Si la lupa se pone en el vino fraccionado, en el mismo período, da una baja de -39,6% (vino color: -39,7%y vino blanco: -38,8%). Si se analiza el vino Granel da: -53,7% y es un golpe más fuerte (vino color: -47,2% y vino blanco: -79,8%). Sin embargo la caída de la exportación de mosto concentrado comparado junio 2023 contra junio 2022 da -61,2%.
El impacto de una de las peores cosechas de uvas de la historia
En Argentina nos agarraron todas las pestes juntas, en octubre tuvimos la helada más grande de toda la historia vitivinícola que nos dejó una cosecha de 14.400.000 quintales de uva, cuando en los últimos 12 años, una cosecha normal era de 23 millones de quintales.
Esta fue la cosecha más baja de la historia. Los gobiernos provinciales y el Estado nacional asistieron a los más débiles porque iba a ver menos trabajo, producción y ventas. Las empresas comenzaron a cuidar sus stocks y hubo una suba de precios de 15,6% al mercado externo.
Tenemos menor oferta exportable, casi no tenemos a granel y se cuidan los canales más rentables. La buena noticia es que tenemos llegaremos al 1 de junio de 2023 con 5,5 meses de stock.
Además, Sergio Massa, el titular de Economía, nos aseguró que no va a permitir que se importe vino. Para evitar lo que nos pasó en 2016 que se importó vino y en 2019 nos sobró”, señaló Luis Sentinelli.