Se acentúa la racha negativa del maíz en la semana tanto en el mercado local como en la plaza externa de referencia, con precios que fueron de más a menos.
El rápido avance de la siembra en Estados Unidos presiona los valores futuros de Chicago, luego de conocerse que los farmers americanos ya han cubierto el 83% del área de intención, por encima del promedio de los últimos 5 años, despejando de momento los temores en lo relativo al clima y su impacto en las labores.
En el mercado local, la oferta continúa siendo muy acotada, y se restringe a las posiciones más cortas. De todos modos, el porcentaje de maíz ya vendido en relación con la producción total estimada alcanza el 40%, en línea con el 41% promedio de los últimos cinco años y por encima del 34% anotado a la misma altura del año anterior. Sin embargo, el porcentaje de las compras “a fijar”, a las que aún no se le ha puesto precio en firme, representa un máximo histórico del 39% de las operaciones a la fecha.
Las dos hojas de la tijera que recortan los incentivos para ponerle precio a la cosecha son, por un lado, precios internacionales de commodities agrícolas que se encuentran, en términos generales, aún por debajo de los vigentes en los últimos tres años, y, por el otro, un tipo de cambio real que ha perdido competitividad en los últimos meses.
Entre tanto, la noticia de la semana fue la habilitación del gobierno de China para las importaciones de maíz argentino genéticamente modificado, abriendo la puerta así a un nuevo mercado para el cereal local. Aunque China es un viejo conocido para los exportadores granarios nacionales, desde el año 2017 que una tonelada de maíz embarcada no tiene como destino al Gigante Asiático.
China cosecha más maíz que Argentina y Brasil juntos, es el segundo país productor a nivel mundial luego de Estados Unidos y previo a la campaña 2009/2010 su participación en el comercio internacional por el cereal no era en absoluto significante. Sin embargo, desde el año 2020 el Gigante Asiático a pateado el tablero importando casi 30 Mt de maíz y manteniendo desde entonces compras por más de 20 Mt, en un afán de blindar sus reservas de granos.
En un principio, Estados Unidos lideraba con comodidad el mercado de exportación de maíz a China, aunque desde el año pasado la política del gigante asiático orientada a diversificar la originación de compras internacionales ha favorecido principalmente a Brasil, que en 2023 exportó 16 Mt del cereal hacia China. Este mercado que se abre para nuestro país puede cambiar sustancialmente las reglas de juego de la inserción internacional argentina a futuro.