El tomate platense quedó registrado hoy como una especie criolla en el Instituto Nacional de Semillas (Inase), en un acto encabezado por el ministro de Desarrollo Agrario de la provincia de Buenos Aires, Javier Rodríguez.
“Es un reconocimiento al trabajo que llevamos adelante desde la Estación Experimental de Gorina en articulación con productoras y productores del cinturón hortícola, y otros organismos e instituciones que apostamos y creemos en el desarrollo de innovación tecnológica aplicada a la producción”, resaltó el ministro.
Rodríguez afirmó que “además, este registro protege el esfuerzo y la actividad de la agricultura familiar, a los pequeños productores y a las cooperativas”.
En el Programa Provincial de Mejoramiento Genético Vegetal del Ministerio de Desarrollo Agrario bonaerense, se inscribieron en el Inase los tomates platenses Prieto (Barrio Aeropuerto), Paolettich (Arana), Molinaro, Luna (Gorina), Grasso (Olmos), Gentile (Gorina), Del Manso (Berisso), Carcione (Gorina) y Bustos (Hernández).
NO ES CUALQUIER TOMATE
El tomate platense, una especie valorada por ser un “tomate con sabor a tomate”, se destaca por su sabor intenso y natural, su color rojo y su calidad.
Además, se trata de tomates cultivados con prácticas agroecológicas por productores y productoras familiares en el cinturón hortícola de La Plata.
De esta manera se acompañó a las productoras del Grupo de Tomate Platense, en conjunto a técnicos del Ministerio, el Inase, el Inta, el Inafci y la Facultad de Ciencias Agrarias y Forestales de la UNLP, para que se otorgue el merecido reconocimiento a esta hortaliza típica local.
En la Estación Experimental Gorina se desarrollan diferentes líneas de investigación e innovación vinculadas a tecnología de base agroecológica para el manejo de sistemas hortícolas y el mejoramiento genético de distintas variedades de vegetales, particularmente el tomate.
EL TRABAJO
En los primeros años de trabajo se analizó la variabilidad de los materiales de tomate platense, se avanzó con la selección de semillas para resaltar el sabor, reducir el tamaño, y mejorar su comportamiento sanitario.
Durante la última temporada, el objetivo fue incrementar la producción de semillas a campo bajo un manejo agroecológico.
A través de estas acciones se logró recuperar al tomate platense y extender cada vez más su producción y consumo. Asimismo, se logró ampliar la oferta varietal de materiales y la diversidad productiva local.
La inclusión del tomate platense como semilla criolla en el Inase le brinda protección, al considerarla recurso fitogenético y patrimonio cultural; se favorece a la Agricultura Familiar Campesina e Indígena (inscriptos en el Registro Nacional de Agricultura Familiar) y a Cooperativas, Asociaciones o Agrupaciones integradas por agricultores familiares (Registro Nacional de Organizaciones de Agricultura Familiar, Renoaf), los únicos habilitados para entregar y/o comercializar todo tipo de semillas criollas, inscriptas en el Inase.