BASF refuerza su compromiso con el agro argentino en Maizar 2025 con una propuesta integral para el maíz que combina genética avanzada, protección de cultivos y herramientas digitales que permiten producir más y mejor, con sustentabilidad. Así lo explicó Ricardo Ortega, gerente de cultivo de maíz de la compañía, en una entrevista exclusiva con Palabra de Campo, en medio del ritmo agitado del evento y el característico sonido del tren que cruza el predio.
“Este año estamos bastante más optimistas. Venimos de dos campañas muy duras, pero el invierno pasado fue muy crudo y eso cambió totalmente la situación con la chicharrita”, expresó Ortega. La plaga, que afectó severamente a la producción del año anterior, podría tener este ciclo un impacto mucho más controlado.
Genética y tecnología para una campaña con mejores perspectivas
En Maizar, BASF presentó dos nuevos híbridos de maíz: BASF 5575 VT3Pro y 5747 Viptera 3 CL, diseñados para responder a las exigencias del campo argentino. Ambos materiales demostraron excelente rendimiento, estabilidad y adaptabilidad en distintas redes de ensayo. El Viptera 3 CL, en particular, “se adapta muy bien al NOA por las problemáticas que tiene, como el cogollero”, señaló Ortega.
“Nuestro compromiso es estar al lado del agricultor, conocer sus necesidades y brindar soluciones sustentables e innovadoras que impacten en la rentabilidad de su producción”, afirmó el referente técnico de BASF durante la charla con Palabra de Campo.
Pero la propuesta de BASF va más allá de la genética. Incluye productos ya conocidos y validados, como SIDO APAC, Convey® y Zidua® Pack, y también incorpora Voraxor®, un herbicida lanzado en 2024 que combina saflufenacil y trifludimoxazin, ideal para el control de malezas de hoja ancha en pre-siembra.
Xarvio® y el mapeo digital de malezas: precisión al servicio del agro
Uno de los puntos más destacados de la participación de BASF fue la evolución de su plataforma digital xarvio® FIELD MANAGER, que ahora incluye la herramienta Mapeo Digital de Malezas (MDM).
“Con un dron hacemos un mapeo del lote. En menos de 24 horas podemos tener un mapa de malezas que se carga en la terminal de la máquina del productor. Esa aplicación se dosifica en base a la densidad de maleza”, explicó Ortega.
Esta tecnología permite ahorrar hasta un 60% en insumos, agua y energía, ajustando en tiempo real la aplicación de herbicidas. Ortega remarcó que este tipo de herramientas “lleva a una agronomía sustentable” y representa una ventaja clave para un cultivo de márgenes cada vez más ajustados.
“Hoy, con márgenes desafiantes, la tecnología y la digitalización permiten lograr recursos mucho más aprovechables. Esto levanta los techos de productividad”, señaló.
El maíz como eje de una agricultura moderna
La visión de BASF va más allá del lote: busca ofrecer un paquete tecnológico completo que integre genética, protección de cultivos, digitalización y sustentabilidad.
“Es un complemento de todo. Hoy el maíz necesita tecnología de punta. La productividad no se alcanza solo con un buen híbrido, sino con un enfoque completo”, aseguró Ortega. “Eso incluye herramientas digitales, fertilización variable, siembra variable, y manejo inteligente de insumos.”
Durante la entrevista, Ortega también puso en contexto el actual panorama sanitario y técnico:
“La chicharrita está hace 20 años, pero hoy tenemos la herramienta más importante: el conocimiento. Antes no había red de monitoreo. Hoy sí. Si el invierno es normal, no deberíamos tener los problemas del ciclo anterior”, destacó.
Innovación y sustentabilidad con arraigo local
La estrategia de BASF, resumida bajo el lema “por amor a la agricultura”, se plasma en inversiones concretas en biotecnología, herramientas químicas y soluciones digitales, adaptadas a las condiciones reales del productor argentino.
En 2024, la división agrícola de BASF generó ventas por 9.800 millones de euros, impulsadas por desarrollos como xarvio® y productos adaptados a cada región.
“Trabajamos con expertos y productores para construir sistemas agrícolas más eficientes, sostenibles y adaptados a las necesidades de cada región. Nuestro enfoque está en integrar innovación con resultados concretos en el campo”, enfatiza el comunicado institucional de la compañía.
Maizar 2025: punto de encuentro para el futuro del maíz
Para BASF, la participación en el Congreso Maizar no solo es una instancia comercial. Es un espacio de diálogo directo con productores, asesores y técnicos, donde se comparten experiencias, desafíos y soluciones.
“Hay mucho por hacer. El productor argentino es muy receptivo a la innovación. Y nosotros tenemos la obligación de ofrecerle un acompañamiento real, que le permita tomar decisiones más rentables y más sustentables”, concluyó Ortega.












