El ácido ascórbico, conocido como vitamina C, es un nutriente que el cuerpo necesita en pequeñas cantidades para funcionar y mantenerse sano, señala el Instituto Nacional del Cáncer (NCI, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos.
Esta vitamina se encuentra en todas las frutas y verduras, en especial en los cítricos, las fresas, el melón, los pimientos verdes, los tomates, el brócoli, las verduras de hoja verde y las papas. Aunque suele considerarse que la naranja es la reina de la vitamina C, hay otra fruta que la supera: la acerola.
Qué es la acerola y cuáles son sus características
La acerola (Malpighia emarginata) también conocida como cereza de Barbados o cereza de las Indias Occidentales es un pequeño fruto parecido a una cereza, describe un artículo de revisión publicado en línea en 2018.
El arbusto de la acerola florece en climas cálidos y tropicales. Se cultiva desde el sur de Texas (Estados Unidos) pasando por México y Centroamérica, hasta el norte de Sudamérica y todo el Caribe, además de la India. Entre esos países. Brasil se destaca como uno de los mayores productores.
Los frutos son pequeños, tienen entre 1 y 4 centímetros de diámetro y pesan entre 2 y 15 gramos. Una vez madura, la piel de la fruta es de color rojo, especifica el estudio.
“Aunque el dulzor de la fruta varía según la variedad, salvo unas pocas que son dulces, la mayoría son bastante ácidas y agrias”.
Cuál es el contenido de vitamina C de la acerola
El artículo destaca que la acerola contiene una cantidad exorbitante de ácido ascórbico, además de otros fitonutrientes como ácidos fenólicos, flavonoides, antocianinas y carotenoides.
Concretamente, posee entre 50 y 100 veces más contenido de vitamina C que otras frutas como la naranja o el limón y solo es comparable con el camu camu (Myrciaria dubia).