En un nuevo capítulo de tensión gremial, la Unión Argentina de Trabajadores Rurales y Estibadores (UATRE) lleva adelante este lunes cortes de rutas y manifestaciones en distintos puntos del país. El sindicato, conducido por José Voytenco, reclama una recomposición salarial que supere los actuales niveles de indigencia y denuncia la propuesta de las entidades agropecuarias como “una afrenta a la dignidad del trabajador rural”.
Las medidas llegan tras el fracaso de la reunión paritaria del pasado viernes 18 de julio en el marco de la Comisión Nacional de Trabajo Agrario (CNTA). En ese ámbito se esperaba avanzar con un nuevo acuerdo salarial, pero, según denunció el sindicato, la discusión fue interrumpida por la intransigencia de las entidades empresarias.
“La actitud fue absolutamente provocadora y ofensiva”, sostuvo la UATRE en un comunicado, señalando directamente a CRA, CAME, CONINAGRO y la Federación Agraria Argentina como responsables de obstaculizar cualquier tipo de acuerdo. La reunión terminó, una vez más, en un cuarto intermedio, esta vez programado para el martes 22 de julio.
Cortes de rutas y movilizaciones en Entre Ríos, Córdoba, Salta y Jujuy
Las protestas incluyen interrupciones de tránsito en rutas clave del interior productivo del país. En Entre Ríos, la delegación gremial bloquea el principal acceso a la provincia, mientras que en Villa María (Córdoba) se realiza un corte en una zona neurálgica: la intersección entre Ruta Nacional 9, Ruta Provincial 5 y Ruta 158 del Mercosur.
En el norte del país, las delegaciones de Salta y Jujuy decidieron movilizarse de manera conjunta hacia Salta Capital, donde a las 10:30 de la mañana se concentrarán frente a la sede local de la Cámara Argentina de la Mediana Empresa (CAME).
Las protestas son, según la UATRE, “una respuesta directa a la negativa de los empleadores a reconocer el brutal deterioro del poder adquisitivo de los peones rurales”.
“La dignidad no se negocia”: duro comunicado del gremio rural
“La dignidad de nuestros trabajadores no se negocia. Exigimos salarios dignos y condiciones laborales justas”, remarcaron desde el sindicato. La dirigencia de la UATRE acusa a las cámaras empresarias de pretender “institucionalizar el salario de hambre”, con aumentos que ni siquiera cubren la canasta básica alimentaria, lo que consolidaría la pobreza estructural del peón rural.
“No vamos a convalidar paritarias de miseria ni a firmar ningún acuerdo que legitime la explotación y el empobrecimiento del trabajador rural”, advirtieron.
Según fuentes sindicales, la intención de fondo de las entidades agropecuarias es mantener el salario mínimo agrario congelado o con incrementos mínimos que no alcanzan a cubrir la inflación acumulada. La oferta que llevaron a la mesa el viernes pasado fue considerada “insultante”.
Contexto tenso en el campo: salarios en disputa
Las protestas de la UATRE se dan en un contexto más amplio de conflicto social en el sector agropecuario, donde conviven reclamos de baja rentabilidad por parte de los productores con denuncias de precarización laboral por parte de los gremios.
El salario mínimo de los trabajadores rurales se encuentra por debajo de los $250.000 mensuales, en un contexto donde la canasta básica total para una familia tipo ya supera ampliamente ese valor. El gremio exige una recomposición inmediata que acerque el haber a los $400.000, sumado a mejores condiciones laborales y reconocimiento de derechos.
La reunión del próximo martes se presenta como decisiva, aunque en el entorno de Voytenco no hay optimismo. “Si siguen sin escuchar, vamos a profundizar las medidas, porque este modelo de esclavitud rural no va más”, advirtieron desde la conducción sindical.












