Neogen, la marca de semillas de soja y trigo de GDM que forma parte de Sembrá Evolución, eligió la localidad bonaerense de Chacabuco para mostrar que su apuesta en el país no es circunstancial. Allí, frente a productores y técnicos, lanzó cinco nuevas variedades de soja adaptadas a distintos ambientes productivos y con tecnologías pensadas para enfrentar la creciente presión de malezas y maximizar rindes. Pero detrás de los lanzamientos también late una estrategia más profunda: consolidar su participación en el mercado argentino y expandir el sistema Sembrá Evolución, el modelo de reconocimiento de propiedad intelectual que gana terreno entre los productores.
“Hoy ya contamos con más de 20.500 productores dentro de Sembrá Evolución. En 2021-2022 eran apenas 1.500. Y pasamos de 150.000 hectáreas de soja a más de 3.200.000, con el objetivo de llegar a 4 millones al cierre de este año”, destacó Guillermo Ramadori, gerente comercial de Neogen, durante la entrevista con Palabra de Campo.
Una marca que busca consolidar protagonismo
Si bien Neogen lleva cuatro años en el país, este momento marca un salto de escala. Según Ramadori, la marca se apoya en tres grandes pilares: el producto, con un portafolio que cubre grupos de madurez del 4 al 7 y todas las biotecnologías disponibles; la red comercial, con 150 puntos de venta, multiplicadores y una alianza estratégica con ACA que facilita el acceso en cooperativas y centros de desarrollo; y el sistema Sembrá Evolución, que garantiza que las regalías se reinviertan en investigación y desarrollo.

“Sembrá Evolución nació con Neogen. Para nosotros es el círculo virtuoso que permite que la inversión vuelva en nuevas variedades y tecnologías. Encontramos en este modelo entre privados una forma transparente y eficiente de reconocer la propiedad intelectual”, explicó el gerente comercial.
Consultado sobre la percepción de los productores frente al sistema, Ramadori reconoció que al principio hubo dudas y resistencias: “Siempre recomendamos que se asesoren, que lean el contrato. Es un trámite sencillo, sin costo, y con vigencia hasta 2032. Hoy la mayoría de los productores ya entienden el valor de sumar tecnología y genética, y eso se refleja en el crecimiento de la adopción.”
La estrategia multimarca y la competencia por el rinde
El respaldo de GDM y su estrategia de desarrollo global fueron claves para que Neogen pueda acelerar la llegada de nuevas soluciones al mercado argentino. En Brasil, la marca logró alcanzar entre el 12% y el 13% del mercado de soja, y ahora apunta a consolidar una presencia similar en Argentina. “La idea es que en ese menú de dos o tres marcas que tiene el productor, una de ellas siempre sea de GDM. Con una sola marca a veces no lográs penetrar todo lo que puede ser un productor en su proceso de decisión. Por eso apuntamos a una estrategia multimarca”, indicó Ramadori.
La solidez de esa propuesta se sostiene, en parte, en la capacidad de investigación y generación de datos. “La cocina de investigación y desarrollo es la base. Todos los años llegan nuevas variedades que complementan y mejoran nuestro portafolio. Eso nos permite dar respuestas a las necesidades del productor en cuanto a rinde, estabilidad y estrategias defensivas u ofensivas según el ambiente”, comentó.
Más productividad, decisiones conscientes
El avance de Neogen y el crecimiento de Sembrá Evolución también llegan en un momento de transición en la agricultura argentina. Según Ramadori, tras años en que las decisiones estuvieron condicionadas casi exclusivamente por la macroeconomía, ahora empieza a haber un mayor foco en variables productivas. “El productor vuelve a mirar su lote con criterios microeconómicos. Y ahí se empiezan a ver las diferencias entre quienes vienen haciendo bien las cosas y quienes todavía tienen recorrido”, sostuvo.
Una de esas diferencias pasa por la calidad de la semilla que se siembra. Ramadori fue claro al respecto: “Mi recomendación es que se analicen todas las variables que inciden en el éxito. Hay muchas diferencias en lote entre una semilla fiscalizada y un uso propio. Hay que evaluar la pureza varietal, la sanidad, el potencial de rinde, y tomar decisiones informadas. La semilla es la primera decisión estratégica que se toma en la campaña.”
En esa línea, el ejecutivo subrayó que la propuesta de Neogen no se agota en la genética: “Contamos con un equipo comercial que actúa como motor de transferencia de conocimiento. Tenemos multiplicadores y asesores que están cerca del productor para explicarle cada detalle y acompañar sus decisiones.”
De cara a la campaña que viene, la expectativa de Neogen es consolidar la curva de adopción de sus variedades y sostener el ritmo de crecimiento de Sembrá Evolución. “Estamos convencidos de que los productores valoran las propuestas que suman respaldo, datos y resultados comprobables. Nuestro desafío es que Neogen siga ganando lugar en cada región productiva del país”, concluyó Ramadori.