En general, el clima en Argentina ha sido favorable para la campana de produccion que ocupa la mayor parte de la superficie agricola, aunque las intensas lluvias registradas desde fines del verano y durante el otono e invierno han generado problemas en algunas zonas. Por ello, las proyecciones indican que la superficie sembrada podria ser menor que la del ano pasado.
En el norte del pais se observa una intensa actividad de siembra de soja. El ultimo informe semanal de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), que analiza el inicio de la campana 2025/26, subraya la situacion en esa region y en el area central de influencia del mercado rosarino.
Si bien las condiciones climaticas han sido favorables para el cultivo en terminos generales, han favorecido tambien el crecimiento de malezas, que se constituyen en una de las principales amenazas para la soja. Durante el periodo de pre-siembra se registra la emergencia de numerosas plantas tras las lluvias quincenales de primavera, lo que complica las labores agricolas y el control eficaz de las malezas.
El informe del BCR senala que, aunque la siembra de soja comienza en torno a la semana 20, existen serias dificultades para el manejo de malezas. Las lluvias obligan a ajustar las estrategias de control, lo que implica mayor complejidad en las practicas fitosanitarias. Especies como Red Yuyo y ramas negras (black branch) se estan volviendo cada vez mas dificiles de controlar.
Tecnicos y agronomos de la zona de Bigand (Santa Fe) advierten que las precipitaciones semanales favorecen la aparicion de nuevas semillas de malezas y, en muchos casos, impiden actuar a tiempo con tratamientos oportunos. El principal obstaculo para la siembra es que las medidas de control no siempre alcanzan a mitigar la fuerte presion de malezas.
Productores que no aplicaron controles preemergentes efectivos estan enfrentando problemas importantes por la abundancia de plantas competidoras en lotes destinados a soja. En Camilo Aldao (Cordoba), los tecnicos insisten en que los tratamientos preemergentes son esenciales para manejar esta problematica, especialmente en primaveras con lluvias frecuentes.
En sintesis, la campana 2025/26 comienza con condiciones climaticas favorables para el cultivo en general, pero la reiteracion de lluvias y la mayor presion de malezas obligan a adoptar estrategias de control mas exigentes y puntuales para evitar perdidas de rendimiento y reducir la superficie efectiva sembrada.












