Tether Investments, la empresa detrás de la stablecoin USDT, ha puesto su mirada en el sector agroindustrial de Argentina. Actualmente, posee el 19,4% de Adecoagro, una de las principales agropecuarias del país, y ha lanzado una oferta para adquirir hasta el 51% del capital accionario.
La propuesta, presentada el pasado 16 de febrero de 2025, es no vinculante y no solicitada, con un precio de US$12,41 por acción. El impacto no tardó en reflejarse en los mercados: tras el anuncio, las acciones de Adecoagro en la Bolsa de Nueva York subieron un 12%, alcanzando los US$10,99.
El Directorio de Adecoagro se reunió para analizar la propuesta y decidió contratar asesores legales y financieros para evaluar si la operación es beneficiosa para la compañía y sus accionistas.
Adecoagro: un gigante del agro con presencia regional
Adecoagro es una de las agropecuarias más grandes de América del Sur. Fundada en 2002 por un grupo de empresarios argentinos, la compañía ha consolidado su presencia en Argentina, Brasil y Uruguay.
Hoy en día, la empresa cuenta con:
- 210.400 hectáreas de tierras en producción.
- Más de 2,8 millones de toneladas de productos agrícolas al año.
- Más de 1 millón de MWh de energía renovable generada.
- Un equipo de 10.000 empleados.
- Marcas reconocidas en distintos rubros, como:
- Lácteos: Las Tres Niñas, Apóstoles y Angelita.
- Arroz y galletitas: Molinos Ala.
- Energía y granos: azúcar, etanol, maíz, trigo, soja, girasol y maní.
Además de la producción agrícola, Adecoagro se ha convertido en un referente en la generación de bioenergía en la región, aprovechando subproductos de la caña de azúcar y otras materias primas.

Tether y su apuesta por el agro argentino
Tether Investments ingresó en el capital de Adecoagro en septiembre de 2024, cuando adquirió un 10% de las accionespor US$102 millones. Posteriormente, amplió su participación hasta el 19,4%, convirtiéndose en el principal accionista minoritario.
Ahora, con esta nueva oferta, busca convertirse en el accionista mayoritario, controlando más de la mitad de la empresa. De concretarse la operación, Tether no solo pasaría a dirigir una de las agropecuarias más grandes de Sudamérica, sino que además consolidaría su presencia en sectores estratégicos como la producción de alimentos y energía renovable.
El gigante cripto fue fundado por Paolo Ardoino, Giancarlo Devasini y Ludovicus Jan Van der Velde. Su stablecoin, USDT, se ha convertido en la criptomoneda estable más utilizada en el mundo, permitiendo transacciones digitales con un valor atado al dólar estadounidense.
Un contexto desafiante para el sector agropecuario
El anuncio de Tether llega en un momento complejo para el sector agropecuario argentino. En los últimos meses, empresas emblemáticas como Grobo y SanCor han enfrentado dificultades financieras, mientras que el mercado de criptomonedas en Argentina atraviesa una crisis vinculada a la política económica del gobierno de Javier Milei.
A pesar del contexto, Adecoagro ha logrado mantener una facturación anual de más de US$1.500 millones y continúa expandiendo su modelo de negocio. Su crecimiento ha estado acompañado de importantes inversores internacionales, entre ellos George Soros y fondos de inversión qataríes.
Según fuentes cercanas a la compañía, el interés de Tether podría estar motivado por el fuerte desarrollo de Adecoagro en el sector de energías renovables. La empresa no solo produce etanol a partir de caña de azúcar, sino que también genera electricidad a partir de biomasa, un mercado en crecimiento a nivel global.
¿Qué significa esta compra para el futuro de Adecoagro?
Si Tether logra concretar la compra y alcanzar el 51% de las acciones, la empresa podría experimentar un cambio estratégico en su modelo de negocios. Algunos analistas especulan con la posibilidad de que la firma cripto introduzca nuevas herramientas financieras vinculadas a blockchain, potenciando la digitalización en el comercio de materias primas.
Sin embargo, el Directorio de Adecoagro aún no ha dado señales sobre su postura final respecto a la oferta. La empresa mantiene un análisis exhaustivo de la propuesta, priorizando los intereses de sus accionistas y su proyección a largo plazo.
Por ahora, el mercado sigue de cerca esta jugada financiera que podría marcar un antes y un después en la agroindustria argentina. La entrada de una criptoempresa en el control de una compañía agrícola tradicional podría cambiar las reglas de juego y abrir nuevas oportunidades en el sector.