Con menos multitudes pero más oportunidades de negocios. Así podría resumirse la participación argentina en la SIAL China 2025, la feria alimentaria más importante de Asia, que finalizó el 21 de mayo en Shanghái y que volvió a confirmar que la carne argentina en China sigue despertando un gran interés, incluso en un contexto de incertidumbre global.
El Instituto de Promoción de la Carne Vacuna Argentina (IPCVA), acompañado por 26 empresas exportadoras, fue parte del pabellón argentino en el evento. Si bien la afluencia de público fue más baja que en ediciones anteriores, los exportadores coincidieron en que los contactos comerciales fueron más calificados, con compradores específicos y dispuestos a avanzar en operaciones futuras.
“Se cerraron pocos negocios, pero los compradores llegaron con una actitud muy receptiva. Vimos un interés claro por la carne argentina, especialmente por cortes de calidad y por la seguridad alimentaria que ofrece nuestra cadena”, señalaron desde una de las empresas presentes.
Buenos precios, cautela y estrategia digital para el futuro
En materia de precios, el mercado mostró estabilidad respecto de semanas anteriores. La cotización de los principales cortes se mantuvo en niveles similares a los observados en abril, consolidando la leve suba que se viene registrando desde marzo. En paralelo, la situación general estuvo marcada por un enfoque cauteloso: la guerra de aranceles entre China y potencias como Estados Unidos y la Unión Europea sigue generando preocupación en los operadores globales, y a eso se suma el inicio del proceso de salvaguardia que abrió el gobierno chino contra las importaciones de carne vacuna.

A pesar de este marco complejo, el IPCVA logró concretar uno de los avances más importantes de los últimos años en materia de promoción digital. Durante la feria se firmó un acuerdo estratégico con JD.com, una de las plataformas de comercio electrónico más grandes de China, con más de 600 millones de usuarios registrados.
“Este convenio nos va a permitir mostrar nuestra carne directamente al consumidor chino, con un canal de comercialización cada vez más consolidado. Es un paso clave en la digitalización de nuestra estrategia exportadora”, explicó Georges Breitschmitt, presidente del Instituto.
Geopolítica y carne: qué implica el proceso de salvaguardia iniciado por China
Mientras se buscaban nuevos clientes y se promocionaban los atributos de la carne argentina en la SIAL, en paralelo avanzaba un frente legal y diplomático no menor. En diciembre de 2024, el Ministerio de Comercio de la República Popular China (MOFCOM) inició un proceso formal de investigación por salvaguardias sobre las importaciones de carne bovina, lo que podría derivar en la aplicación de nuevos aranceles u otras medidas restrictivas.
La medida afecta directamente a los principales exportadores a China: Argentina, Brasil, Uruguay, Estados Unidos, Australia y Nueva Zelanda. El argumento central esgrimido por los productores chinos que impulsaron la denuncia es que el ingreso masivo de carne importada entre 2019 y 2024 perjudicó gravemente a la industria local, generando sobreoferta y presión sobre los precios internos.
El proceso, que tiene una duración estimada de ocho meses, ya cuenta con la participación activa del IPCVA, que se presentó como parte interesada en defensa de la industria cárnica argentina.
“Estamos defendiendo con firmeza la legitimidad de nuestras exportaciones. La carne argentina no llegó para perjudicar, sino para complementar un mercado que lo exige por volumen, por calidad y por estacionalidad”, afirmaron desde el organismo, que contrató un estudio internacional especializado en derecho comercial para liderar la estrategia legal.
Intercambio con referentes globales y visión de largo plazo
Otro de los puntos destacados fue el diálogo con delegaciones de otros países exportadores, como Uruguay, Brasil, Estados Unidos, Irlanda y Australia. “Aprovechamos la feria no solo para mostrar nuestros productos, sino para intercambiar información con otros institutos de promoción sobre el estado del mercado, las perspectivas arancelarias y la situación de la demanda”, detalló Breitschmitt.
Este tipo de contacto es especialmente relevante cuando todos los países enfrentan una misma amenaza comercial: posibles barreras o impuestos que limiten el acceso al principal importador mundial de carne vacuna.
A pesar de estas tensiones, la delegación argentina volvió con expectativas positivas. “La percepción de los importadores fue muy buena. Hay una demanda estructural que se mantiene firme, y eso abre oportunidades si sabemos sostener una estrategia coherente y coordinada desde el Estado y el sector privado”, expresaron los empresarios.
China sigue siendo clave para la carne argentina
En la actualidad, China representa más del 60 % de las exportaciones de carne vacuna argentina. Esa concentración expone, pero también ratifica que el país asiático es el motor de la demanda global. Incluso con una economía que crece a menor ritmo que hace una década, el consumo de proteínas animales continúa en ascenso, y la carne argentina —reconocida por su calidad— mantiene una ventaja competitiva en el segmento medio y premium.
La SIAL China 2025, en ese sentido, permitió revalidar el posicionamiento del país en un mercado que, aunque más desafiante, sigue siendo prioritario. Desde el IPCVA anticipan que las próximas acciones promocionales también incluirán otras plataformas digitales y eventos dirigidos directamente al consumidor final, aprovechando la digitalización del comercio como una herramienta para sostener e incluso ampliar la presencia de la carne nacional.