“El gobierno insiste en controlar la inflación vía regulación de precios. Se controlan los precios en la góndola y somos los productores los que absorbemos el impacto final”.
Estas son las conclusiones del grupo de productores lecheros de Sociedad Rural 9 de Julio.
El precio de la leche se encuentra muy atrasado respecto del costo de producción y la inflación. Los productores vienen manifestando la preocupación por pérdida de rentabilidad y capital desde el segundo semestre del año pasado. En febrero hay altas probabilidades de que las usinas lácteas no aumenten lo que estaba previsto para este mes.
Los lecheros se reunieron hoy en la Rural de 9 de Julio y evaluaron posibles medidas a tomar. Están entregando la leche que cobrarán durante el mes de marzo, y a pocos días de finalizar el mes, advierten que corren el riesgo de percibir menos de lo proyectado y pactado verbalmente, y que, desde ya, viene por debajo de los valores de subsistencia.
Como siempre lo dicen, la producción láctea es una fábrica a cielo abierto; con altos costos de producción, dolarizados en un 80%; comercializan un producto perecedero; y por último cobran en pesos, luego de haber entregado la totalidad de la producción, con plazos que llegan a los 30 días en la mayor parte de los casos.
Es necesario que el gobierno entienda que la lechería es vital en nuestro país. Hoy puede forzar un precio en la góndola y mañana el mismo consumidor será el afectado cuando no haya leche disponible y la misma demanda eleve los precios; y con el agravante de que en el camino serán numerosos los tambos forzados a salir de la actividad.
Los productores piden que se los escuche y no quieren ser la variable de ajuste de las políticas económicas equivocadas, cuyos resultados ya son conocidos porque fueron sufridos hace pocos años: atentan contra la producción y la generación genuina de mano de obra en el interior de nuestro país.
En concreto solicitan:
-Que las usinas cumplan con las actualizaciones de precios pactadas para febrero y marzo.
-Actualización de los mínimos para el pago del impuesto a los ingresos brutos de la Provincia de
Buenos Aires.
-Quita de retenciones y reembolso a las exportaciones para compensación de impuestos en la
cadena.
-Quita de ridículos requisitos para el acceso a líneas crediticias.
-Líneas de inversión especiales para el sector lechero.
Sin tambos no hay leche fluida en las góndolas
SRA 9 de Julio