Rolando Figueroa se impuso en Neuquén y dejó al MPN por primera vez afuera del gobierno

El actual diputado nacional venció al candidato oficialista Marcos Koopmann en casi toda la provincia. Se abre una larga transición hasta el 10 de diciembre. Hubo una marcada polarización, con aportes clave de las colectoras. El PJ y sus aliados quedaron en tercer lugar pero muy lejos.

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Ganó con un partido nuevo, Comunidad, con un armado variopinto de listas colectoras que saltaron la grieta nacional y con una campaña que no se pareció en nada a la estrategia de saturación publicitaria activada por el oficialismo desde el año pasado. “Fue un campañón”, describió ayer uno de sus hombres de confianza, cuando los números oficiales ya confirmaban la tendencia irreversible que solo ellos parecían haber anticipado.

“Nunca trazamos una fantasía. Caminamos con pie de plomo y sabíamos en qué lugar estábamos fuertes y en cuáles no”, aseguró ayer Figueroa.

Con el 99,28% de los votos escrutados hasta anoche, obtenía el triunfo en la provincia por 35,64% versus los 33,14% de Koopmann, quien reconoció la derrota junto al gobernador Omar Gutiérrez y los principales referentes del partido pasadas las 21.

Lo ajustado del resultado se percibió durante toda la jornada, con voceros de uno y otro espacio que no terminaban de arriesgarse el triunfo y bocas de urna que tanto daban ganador a Figueroa como a Koopmann. Después de las 18, el indicador que parecía anticipar el “batacazo” era el silencio del MPN.

Los datos oficiales del escrutinio provisorio comenzaron a difundirse antes de las 19:30 y siempre mostraron la tendencia a favor de Figueroa. Primero, la diferencia era por cuatro puntos y luego se achicó a tres.

El tercer lugar quedó para el candidato del Frente de Todos Neuquino, Ramón Rioseco, quien empeoró su performance del 2019 y quedó con un 12,71%. Detrás se ubicó Carlos Eguía de Cumplir, con un 7,98% que traccionó el voto “libertario” y mejor desempeño que Pablo Cervi de Juntos por el Cambio Neuquén, quien no pudo retener los votos de la alianza y cosechó un magro 3,75%. El último lugar fue para Patricia Jure del FIT, quien obtuvo un 3,26%, prácticamente lo mismo que en los anteriores comicios.

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Figueroa se impuso en seis de los 16 departamentos de la provincia: Confluencia, Añelo, Huiliches, Chos Malal, Lácar y Los Lagos. La diferencia que obtuvo sobre Koopmann en Neuquén capital fue de siete puntos, lo que demostró un fuerte corte de boleta del electorado que sí ratificó por amplia mayoría a Mariano Gaido para continuar con el MPN en la intendencia.

Figueroa fue recibido por los simpatizantes en el búnker de Avanzar. Foto: Florencia Salto.

El gobernador electo esperó los resultados en su casa y, ya con la tendencia en marcha, se trasladó a la oficina operativa que tiene instalada en la calle Rioja. Desde allí se dirigió a las 21:30 al búnker de Avanzar Neuquén, una de sus listas colectoras, sobre calle Teniente Ibáñez. Su paso fue interceptado por un camión recolector de basura: los trabajadores que iban a bordo fueron los primeros en abrazar a Figueroa, quien avanzó una cuadra y media entre un espiral de felicitaciones y saludos hasta la conferencia de prensa que improvisó en el local.

Dijo que fue una elección “ordenada, pareja” y que los neuquinos eligieron “libremente, sin miedo”.
La participación terminó promediando el 76% en toda la provincia, tras una jornada que se caracterizó por largas filas y demoras en los establecimientos de votación. Los electores tuvieron dificultades frente a la máquina, en algunos casos, para entender el sistema de votación (pese a que se había utilizado en la mayoría de las ciudades, al menos, una vez) y para encontrar sus opciones en una pantalla muy cargada.

La afluencia de votantes avanzó lento: para las 17 solo había votado el 63% del padrón y se llegó a recuperar a última hora, con escuelas que aún tenían personas esperando su turno cerca de las 19.

La proliferación de listas tuvo su efecto en la conformación de la Legislatura que, con los datos provisorios, dejaría al armado de Figueroa con 13 bancas y al Movimiento Popular Neuquino más una aliada con 12. Si los datos del reparto proporcional se confirman, el recinto a partir del 10 de diciembre estará integrado por unas 11 fuerzas políticas.

Figueroa dijo ayer que no sabía si había recibido felicitaciones de sus adversarios porque no había estado con el teléfono desde la tarde. Sin embargo, vaticinó unatransición ordenada con Omar Gutiérrez, a quien homenajeó utilizando una de sus frases de cabecera para demostrar cómo su equipo logró superar la grieta: “los verdaderos enemigos que tenemos la clase dirigencial son los problemas”.

Aseguró que “la transición está estipulada en la ley” pero que, “de todas formas, el gobernador es un hombre de Estado y sé que no va a tener inconveniente en reunirnos”. “El pueblo lo ha elegido a él hasta el 10 de diciembre”, afirmó Figueroa.

Ahora deberá esperar ocho meses para tomar las riendas de la provincia.

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