P: ¿Cómo impacta el nuevo dólar exportador y temporal para la actividad?
Estuvimos en Anuga, en la feria internacional en Colonia, en Alemania. Muy buena visita, muy buenos resultados, muchas posibilidades de operación, algunas concretadas y otras que nos hubiera faltado en ese momento, te estoy hablando de los primeros días de octubre, haber tenido este tipo de cambio. Porque las 12 empresas que participaron tuvieron que desechar varias operaciones como consecuencia de que el tipo de cambio no daba contra el valor internacional del producto.
Pero bueno, ahí estamos, tratando de utilizarlo, porque es muy limitado este tipo de cambio. Quizás cerrando alguna operación, tenemos stock con lo cual podremos cargar y aspiramos a poder cobrar o ingresar la divisa en ese tiempo. No obstante, de las operaciones ya realizadas, el ingreso de divisa va con este nuevo tipo de cambio.
P: ¿Le vendría bien a la actividad que este tipo de cambio temporal quede fijo de cara al próximo gobierno?
Sin ninguna duda. Es un acompañamiento, un beneficio aunque sea transitorio. De todas maneras este nuevo tipo de cambio mueve sensiblemente los costos, porque es un tipo de cambio que impulsa el maíz, que impulsa el valor de la soja, que son elementos fundamentales para nosotros.
En el contexto en el cual uno va llevando adelante lo complejo de todo este año sin perder el estímulo por continuar con la producción en los niveles de los últimos tres años, 3.500.000, 3.600.000 pollos de faena por día hábil y con un abastecimiento fluido al mercado interno, un mercado que respondió muy bien también ante el cierre de las exportaciones, porque se derivó mucho producto de exportación y lo que estaba ya programado para producir al mercado interno, vamos a estar cerrando, de seguir así vamos a estar cerrando este año con 49 kilos de consumo por habitante año. Así que todo ayuda, aunque no es la solución.
P: En cuanto a la suba de costos, ¿Qué está pasando con esa situación en particular?
Los pollos siempre se produjeron como producimos, esto es muy sensible, demanda mucha precisión la cadena de producción avícola, vos viste que hoy por hoy tenés un pollito de 52 gramos en el momento de nacer y a los 42, 43 días pesa 2,7 kilos, 2,9 kilos. Es decir, es de una dinámica tremenda todo eso, es permanentemente un trabajo de selección de planteles y muy buen manejo, buena sanidad y mucha precisión en el alimento.
Para nosotros no es cuestión de decir, bueno, manden maíz y operamos, sino que demandamos de un maíz de una calidad muy especial, por lo cual siempre pagamos algo más y de todas maneras también tenemos condiciones de pagos excepcionales por las que ofrecemos también mejor precio.
Lo mismo con la harina de soja, que es lo que más consumimos, incluso protos, pero fundamentalmente la de la de máxima proteína de mejor calidad. En el medio de todo esto sin duda que lo que fue soja 1 y soja 2 desequilibraron todo, porque era un estímulo, lo mismo que el maíz, era un estímulo para exportar y ahora nos cobijamos nosotros también para incentivar las exportaciones, estos programas sin duda cambiaron el precio del mercado interno.
Pudimos plantear la problemática en la Secretaría de Agricultura, junto con el secretario ante el Ministro de Economía, se entendió perfectamente cómo era el tema y tuvimos compensación por soja 1 y por soja 2, ya no por soja 3 y 4, y recientemente surgió ya la reglamentación y ya se están inscribiendo de compensación para lo que fue el maíz, se asignó un monto de 3.200 millones de pesos, que bueno, en su momento fue un costo adicional que tuvimos, en este momento no tenemos un resarcimiento similar, porque bueno, entre medio pasaron casi 90 días con una inflación muy importante, en aquel momento creo que el maíz había pasado algo así como de 70.000 a 90.000 pesos, y ahora estamos con un maíz que a 120.000 a 130.000 pesos y no conseguimos disponible.
P: El maíz en lo que queda del año y en los primeros meses del año que viene va a ser una caldera, ¿eso lo ven así?
Si, el tema es que el año pasado se pudo trabajar bien en nuestro sector, la Secretaría de Agricultura, entiendo que otros sectores también, el Centro de Exportadores de Cereales, donde se manejó de alguna manera hacer un stop para garantizar la continuidad, no solo de la agricultura, la lechería, con los campos tan devastados como están, el feedlot también, la molienda seca, húmeda, en general, todo este tipo de cosas, y mientras tanto le daban previsibilidad a la exportación como para poder postergar embarques, pero ahora hay que embarcar lo que se postergó antes, así que la situación es compleja, todos estamos ansiosos esperando, no sé, fin de enero que aparezcan los primeros lotes, aunque vengan con un porcentaje de humedad alto, y que siga lloviendo, que siga la lluvia para que se pueda implantar lo que denominamos de segunda.
P: ¿Siguen dentro de los programas de precios del Gobierno?
Nosotros lo que tenemos es una presentación, cuantas veces nos convocan, de la actualización de los costos dentro de una plantilla que elaboramos en los comienzos de este gobierno con la Secretaría de Comercio, y desde ahí con los distintos secretarios hemos manejado de la misma manera, nos convocan, presentamos la planilla de costos, se chequean los costos que tienen que ver, nuestros costos son muy simples, son varios, pero son muy, muy simples, soja, maíz, mano de obra, los convenios, los acuerdos que el Ministerio aprueba, electricidad, gas, transporte, todo ese tipo de cosas, y el valor relativamente se mantiene en lo que está, entonces en todo momento nos han convalidado los ajustes de precio que nosotros sugerimos, nos piden siempre una proyección de los próximos 30 o 40 días, en términos generales cuando estamos con el stock suficiente no tenemos problema en poder manejar esa proyección.
Igual que la carne bovina, la carne ha tenido siete cortes, pero en el resto se ha manejado con, entiendo yo, por lo que vemos en la mesa de las carnes, se ha manetado con libertad, o sea que desde ese punto de vista yo creo que las carnes no hemos creado, no le hemos creado problemas al gobierno porque ha privilegiado las exportaciones de carne bovina, le ha pedido el aporte de siete cortes a un determinado valor, y yo creo que el haber llegado nosotros a 49 kilos, como he dicho en más de una oportunidad, nos convertimos en la espalda de garantizar el complemento de proteína animal para la población, que lo ha tomado muy bien y que sin ninguna duda nuestra carne es la carne que alcanza a todo el espectro social del país.
P: ¿Es la carne más barata?
Decididamente la más barata con distintas ofertas, desde la suprema con 2.500 pesos el kilo, pasando por el pollo con 1.500 pesos el kilo, la patamulo con 1.400, la salita con 700 o 600 pesos, cubre todo lo que se puede necesitar, así que en eso estamos muy satisfechos.