La primera encuesta de intención de siembra de maíz en la región núcleo para el ciclo 2024/25 indica una significativa disminución del área sembrada, estimada en un 15%. Este cambio se produce tras un ciclo anterior marcado por un aumento interanual del maíz del 30% en la región núcleo, demostrando su preeminencia sobre la soja. Sin embargo, la aparición de la chicharrita ha generado preocupaciones que podrían impactar negativamente en el próximo ciclo.
Impacto de la chicharrita en la producción de maíz
La chicharrita, una plaga que afecta gravemente al maíz, ha llevado a los ingenieros agrónomos a prever una caída casi total en la superficie de maíz tardío en la región núcleo. En el este de Córdoba, los expertos advierten que podría haber algunos lotes sembrados más tarde, pero en ningún caso se recomienda la siembra en diciembre. Esta situación es menos crítica en el norte de Buenos Aires, donde la plaga ha tenido un impacto menor, permitiendo a los agricultores planear una disminución del área tardía y compensarla con siembras tempranas.
Recuperación del área por la soja de primera
La caída en la superficie destinada al maíz beneficiará a la soja de primera, que se espera recupere el área perdida. Los productores agrícolas están ajustando sus estrategias de cultivo en respuesta a los desafíos presentados, lo que podría llevar a un cambio significativo en la dinámica de la producción agrícola en la región núcleo.
Conclusión
Las proyecciones para el ciclo de maíz 2024/25 en la región núcleo indican una reducción del 15% en el área sembrada, influenciada en gran parte por la amenaza de la chicharrita. Esta situación no solo afectará la producción de maíz, sino que también permitirá a la soja de primera recuperar terreno. Es esencial que los agricultores continúen adaptándose a estos desafíos para mantener la sostenibilidad y productividad de sus cultivos.
