A partir de las lluvias relevadas en el Este del área agrícola durante la primera semana de septiembre, la siembra de maíz ganó impulso con el comienzo de las labores en Santa Fe, Entre Ríos y Buenos Aires y ya se lograron implantar 403.000 hectáreas.
“El inicio de la nueva campaña del cereal continúa marcado por las reservas hídricas ajustadas o insuficientes que se registran en los perfiles”, indicó la BCBA y agregó que si bien las precipitaciones registradas mejoraron la humedad en los primeros centímetros de suelo en el este del área agrícola, remarcó que “aún son necesarias nuevas lluvias para asegurar el cumplimiento de los planes de siembras tempranas”.
Bajo este panorama y sumado al contexto económico general, los especialistas proyectan que se “impulsarían en esta campaña la incorporación de plantíos tardíos y de segunda ocupación por sobre los tempranos”.
A partir de esto, la entidad bursátil porteña estimó que la superficie a cubrir por el cereal alcanzará las 6,2 millones de hectáreas, 100.000 hectáreas por debajo de lo registrado en la campaña anterior.
En el caso del trigo, la falta de lluvias durante la semana, la condición del cultivo entre normal a bueno y excelente cayó 3 puntos porcentuales y se ubicó en el 60% del total implantado,
Así, las condiciones del cereal de regular a mala alcanzó el 40%, mientras que el 49% de los plantíos muestra una condición hídrica de regular a sequía del 49%.
En el norte del país, ya próximos a iniciar la recolección de los primeros cuadros implantados, las expectativas de cosecha tras la sequía y las heladas son bajas y se esperan mermas de rendimiento que podrían llegar al 50%.
Sin embargo, “en la medida que continúe el déficit hídrico en estas regiones, se espera que las mermas continúen en aumento y, en consecuencia, que se incremente la cantidad de hectáreas abandonadas por bajo rinde”, advirtió la BCBA.
En la franja central, Córdoba y San Luis son las provincias más afectadas por la sequía, mientras que las lluvias que se produjeron en la primera semana de septiembre permitieron una mejora en el estado del cultivo en Santa Fe y Entre Ríos.
Por último, la siembra de girasol avanzó durante la semana 2,3 puntos porcentuales con los trabajos concentrados en Córdoba y Santa Fe.
De esta manera, las labores de siembra alcanzaron a cubrir 15,4% de las 1,4 millones de hectáreas estipuladas para esta campaña.