Gabriel Delgado es el economista especialista en finanzas rurales que el presidente Alberto Fernández eligió para dirigir Grupo Vicentin durante su intervención, anunciada el lunes a la noche.
De blanco, Delgado acompañó la conferencia en la que Alberto Fernández anunció la intervención y expropiación del Grupo Vicentín. (Foto Presidencia)
La carrera de Delgado comenzó en 1998, cuando ingresó al Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) como economista en la EEA Bordenave. Luego, entre 2003 y 2006 se dedicó a las finanzas agropecuarias en Transferencia y Extensión (INTA Central).
Delgado también fue presidente de la Asociación Argentina de Economía Agraria.
Desde 2006 hasta 2013 fue Director Nacional de Sistemas de Información, Comunicación y Procesos del INTA.
Luego, bajo la presidencia de Cristina Kirchner, fue secretario de Agricultura Ganadería y Pesca de la Nación entre 2013 y 2015, y durante un semestre en ese período, asumió como Gerente General de INTeA S.A. (Innovaciones Tecnológicas Agropecuarias).
También dirigió el ex Centro de Investigación en Ciencias Políticas, Económicas y Sociales (CICPES) del INTA, que actualmente es el Centro de Investigación en Economía y Prospectiva (CIEP).
Durante el anuncio del lunes, en el que Fernández dijo “todos los activos de Vicentin pasarán a formar parte de un fondo fiduciario que estará a cargo de YPF Agro. El interventor será Gabriel Delgado”, estuvo sentado cerca del presidente.
“Gracias señor Presidente por la confianza. Para mí es una enorme responsabilidad, he trabajado toda mi vida en cuestiones que tienen que ver con la política agrícola y creo que esta es una decisión que viene en ocasión a rescatar una empresa tan importante como lo es Vicentin para la Argentina“, comenzó diciendo Delgado.
“Los que trabajamos en el sector agropecuario entendemos y defendemos el proyecto de Vaca Muerta y creo que ahora a YPF le toca tener la ‘vaca viva’. Puede ser una analogía y una seña mundial para muchas compañías que se dedican a la producción de energía porque finalmente la producción de petróleo es energía y la producción agrícola, o bioindustrial como me gusta decir a mi, también es energía porque sirve para mover otras cosas”, agregó.
“Este es un sector muy importante para la Argentina y creo que se puede transformar en un instrumento para gestionar políticas públicas muy relevante y que va a trascender durante muchos años la política nacional”, cerró.
